lunes, 5 de mayo de 2008

¿Enfermeros o enfermeras?

Cuando la edad enfría la sangre y los placeres son cosa del pasado, el recuerdo más querido sigue siendo el último, y nuestra evocación más dulce, la del primer beso. Lord Byron

Fusilo aquí, sin pudor alguno, un post leído en el blog cocido madrileño con gofio:
A raiz de un reciente post donde usé el término "enfermeras" alguien me sugirió que era más correcto usar "enfermeros" (para no excluir a los varones). Pensé que tenía razón y lo corregí. Pero una enfermera lectora también me dijo que el término adecuado para referirse a la profesión de "Diplomado Universitario en Enfermería" era "enfermera". Y que los varones dedicados a la enfermería se denominaban "enfermera" a sí mismos.La cosa no me convencía así que consulté con la Real Academia Española.

La respuesta ya ha llegado: el término correcto para referirse a los profesionales de enfermería es "enfermero".Usar "enfermera" no deja de ser algo sexista (pues considera que la enfermería es "cosa de mujeres"). Claro que el machismo o el feminismo son dos formas de sexismo (por mucho que una sea más políticamente correcta que la otra).

Aquí la respuesta de la RAE:Con mucha frecuencia, los sustantivos que designan seres animados cuentan con una forma específica para cada uno de los dos géneros gramaticales (en correspondencia con la distinción biológica de sexos), bien gracias al uso de desinencias o sufijos distintivos de género añadidos a una misma raíz, como es el caso de chico/chica, perro/perra o enfermero/enfermera; bien mediante el uso de palabras de distinta raíz según el sexo del referente (heteronimia), como ocurre en hombre/mujer, caballo/yegua, yerno/nuera.En nuestra lengua, el masculino gramatical no solo se emplea para referirse a los individuos de sexo masculino, sino también para designar la clase, esto es, a todos los individuos de la especie, sin distinción de sexos: El hombre es el único animal racional; El gato es un buen animal de compañía; si bien se ha observado que ciertos plurales de sustantivos masculinos de persona (monjes, brujos, etc.) muy raramente abarcan a las mujeres, sea cual sea el contexto en que se usen, y también que varios sustantivos masculinos que forman parte de oposiciones heteronímicas presentan a veces dificultades para englobar, usados en plural, a los representantes del otro sexo, especialmente en determinados contextos. No obstante, en general, los nombres apelativos masculinos, cuando se emplean en plural, pueden incluir en su designación a seres de uno y otro sexo: Los hombres prehistóricos se vestían con pieles de animales; En mi barrio hay muchos gatos (de la referencia no quedan excluidas ni las mujeres prehistóricas ni las gatas). Sin embargo, el género femenino no posee esta capacidad, de manera que mujer y gata solo hacen referencia, respectivamente, a una persona y a un felino de sexo femenino.
En el caso que usted trae a colación, el número de mujeres que desempeñan labores de enfermería es o ha sido tradicionalmente, por cualesquiera motivos, mucho más elevado que el de hombres; esto propicia que, en la lengua coloquial, sea frecuente referirse a dicho colectivo en femenino, lo cual no significa que el hablante esté excluyendo a los componentes de sexo masculino (tal vez, sencillamente, no los está contemplando, no está considerando su existencia); concretamente, en el caso de su consulta, lo normal es suponer que el que pregunta ¿Hay alguna enfermera que pueda atenderme? no está rechazando ser atendido por un enfermero.
A pesar de ello, la única posibilidad gramaticalmente correcta sería emplear la denominación enfermero como genérico de la profesión (Si acudes a tu enfermero).
El hecho de que el número de mujeres que la ejercen sea mucho más elevado que el de hombres no cambia la situación en absoluto; del mismo modo, el hecho de que haya más licenciadas que licenciados en Filología, por ejemplo, no haría que dejase de resultar chocante e inapropiado designar con el término filólogas a este colectivo.
Reciba un cordial saludo. Departamento de «Español al día»Real Academia Española

2 comentarios:

tuli dijo...

Hombre creo que está bastante claro,al igual que abogado designa a la profesión sin importar el sexo, es lo normal, la gramática es así, en todos los casos de sustantivos de oficio el término neutro es a través de la terminación(sufijo)-o.
Saludos gambitero!

Sr. Lebowski dijo...

Tito tuli!!Me alegra mucho tu presencia por mi humilde blog, y es de agradecerla opinión de un señor filólogo hispánico!Pues aunque está claro, a mi me siguen llamando enfermera todos los días, las listas son listas de enfermeras, los turnos son turnos de enfermeras...y así hasta el infinito y más allá!!
Enhorabuena por vuestro blog http://freebirdmusic.blogspot.com/
me ha encantado y os animo a que sigais publicando en él.Un abrazo